Page 120 - Saberes y Raíces - Español 1
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11.  Escribe las partes de la carta en donde corresponda.


                       Despedida             Firma               Cuerpo            Lugar y fecha          Saludo




                                                                                            “Año de la Agricultura”, Habana
                      Fidel:
                      Me recuerdo en esta hora de muchas cosas, de cuando te conocí en casa de María Antonia, de cuando
                      me propusiste venir, de toda la tensión de los preparativos.
                         Un día pasaron preguntando a quién se debía avisar en caso de muerte y la posibilidad real del he-
                      cho nos golpeó a todos. Después supimos que era cierto, que en una revolución se triunfa o se muere
                      (si es verdadera). Muchos compañeros quedaron a lo largo del camino hacia la victoria.

                         Hoy todo tiene un tono menos dramático porque somos más maduros, pero el hecho se repite. Sien-
                      to que he cumplido la parte de mi deber que me ataba a la revolución cubana en su territorio y me des-
                      pido de ti, de los compañeros, de tu pueblo, que ya es mío.
                         Hago formal renuncia de mis cargos en la dirección del partido, de mi puesto de ministro, de mi gra-
                      do de comandante, de mi condición de cubano. Nada legal me ata a Cuba, sólo lazos de otra clase que
                      no se pueden romper como los nombramientos.
                         Haciendo un recuento de mi vida pasada creo haber trabajado con suficiente honradez y dedicación
                      para consolidar el triunfo revolucionario. Mi única falta de alguna gravedad es no haber confiado más
                      en ti desde los primeros momentos de la Sierra Maestra y no haber comprendido con suficiente celeri-
                      dad tus cualidades de conductor y de revolucionario. He vivido días magníficos y sentí a tu lado el or-
                      gullo de pertenecer a nuestro pueblo en los días luminosos y tristes de la crisis del Caribe. Pocas veces
                      brilló más alto un estadista que en esos días, me enorgullezco también de haberte seguido sin vacila-
                      ciones, identificado con tu manera de pensar y de ver y apreciar los peligros y los principios. […]
                         Sépase que lo hago con una mezcla de alegría y dolor; aquí dejo lo más puro de mis esperanzas de
                      constructor y lo más querido entre mis seres queridos… y dejo un pueblo que me admitió como su hijo:
                      eso lacera una parte de mi espíritu. En los nuevos campos de batalla llevaré la fe que me inculcaste, el
                      espíritu revolucionario de mi pueblo, la sensación de cumplir con el más sagrado de los deberes: luchar
                      contra el imperialismo dondequiera que esté; esto reconforta y cura con creces cualquier desgarradura.
                         Digo una vez más que libero a Cuba de cualquier responsabilidad, salvo la que emane de su ejem-
                      plo. Que si me llega la hora definitiva bajo otros cielos, mi último pensamiento, será para este pueblo y
                      especialmente para ti. Que te doy las gracias por tus enseñanzas y tu ejemplo y que trataré de ser fiel
                      hasta las últimas consecuencias de mis actos. Que he estado identificado siempre con la política exte-
                      rior de nuestra revolución y lo sigo estando. Que en dondequiera que me pare sentiré la responsabili-
                      dad de ser revolucionario cubano y como tal actuaré. Que no dejo a mis hijos y mi mujer nada material
                      y no me apena; me alegro que así sea. Que no pido nada para ellos, pues el Estado les dará lo suficien-
                      te para vivir y educarse.
                         Tendría muchas cosas que decirte a ti y a nuestro pueblo pero siento que son innecesarias, las pala-
                      bras no pueden expresar lo que yo quisiera, y no vale la pena emborronar cuartillas.
                         Hasta la victoria siempre, ¡Patria o Muerte!
                         Te abraza con todo fervor revolucionario
                         Che
                                                       Fuente: https://ciudadseva.com/texto/carta-de-despedida-del-che-a-fidel/ (Consulta: 14 de mayo de 2024).




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